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viernes, 11 de abril de 2008

La llama olímpica ya recorre Buenos Aires

En un marco de gran expectativa y tras una larga espera, la antorcha olímpica comenzó a desfilar en la Argentina por primera vez en su historia como parte de un recorrido de 137.000 kilómetros por todo el mundo.
Luego de un breve discurso, Mauricio Macri recibió la antorcha de manos de organizadores para entregársela al windsurfista Carlos Espínola, quien comenzó el trayecto poco después de las 14.30.
Minutos más tarde, la antorcha comenzó su recorrido por agua de la mano de la remera María Julia Garisoain.
Cerca de las 15, volvió a tocar tierra para continuar el paseo.
La llama olímpica arribó en la tarde de ayer a Buenos Aires bajo un importante operativo de seguridad y fue resguardada durante la noche y la mañana de hoy en un lugar secreto.
En total son ochenta los elegidos para llevar el fuego olímpico, la mayoría deportistas, en un recorrido que une Puerto Madero con la Plaza de Mayo, y seguirá por Diagonal Norte, por las avenidas 9 de Julio, Del Libertador y Figueroa Alcorta hasta el Club Hípico Argentino, entre las 13.30 y las 17.
La largada fue en el anfiteatro Lola Mora, tras un espectáculo del bailarín Iñaki Urlezaga. El cierre, en el Hípico, estará a cargo de Soledad Pastorutti y Luciano Pereyra.
Cada uno de los relevistas lleva la antorcha a pie unos 200 metros, en un recorrido que en total tendrá casi 14 km. Ante la ausencia inesperada de Diego Armando Maradona, el windsurfista Carlos Espínola fue el primer deportista argentino en tener en sus manos la llama olímpica. Desde que partió, el 24 de marzo último desde el templo de Hera, en Olimpia, Grecia, la antorcha fue apagada en varias oportunidades por activistas de la organización Free Tibet, férreos oponentes a la realización de los Juegos Olímpicos en Pekín, que además protagonizaron serios incidentes en el paso de la llama olímpica por Londres y París.
Agua. Un espectador lanzó una bombita de agua contra la antorcha cuando la llevaba el deportista ecuestre Lucas Werthein por la Plaza de Mayo. La bombita fue interceptada por uno de los agentes de seguridad, sin que el incidente pasara a mayores.
Los cortes de calles. A medida que la movilización avance, las calles que atraviese estarán cortadas por 10 minutos, y volverán a abrirse al tránsito una vez que pase la multitud. En Puerto Madero se interrumpió el tránsito en la avenida Calabria (entre Dellepiane y Lantieri), avenida Rosario Vera Peñaloza (entre Calabria y Manso), avenida Juana Manso (entre Peñaloza y Villaflor), avenida Azucena Villaflor (entre Manso y Moreau de Justo) y la avenida Machaca Güemes (entre Olga Cossetini y Eduardo Madero).
El operativo de seguridad. Las medidas de seguridad tomadas para el evento tienen un costo para la ciudad de más de 150.000 pesos, según confirmaron fuentes oficiales, e incluyen 1200 policías, 1500 efectivos de la Prefectura Naval y 3000 "colaboradores", entre empleados del gobierno de la ciudad y voluntarios de entidades deportivas.
Las protestas. Poco después del mediodía, un grupo de militantes chinos disidentes, agrupados en torno de la filosofía de Falun Gong, perseguida por el gobierno chino, llegaron al Obelisco, donde iniciaron una marcha de protesta.
Ataviados con túnicas rojas y blancas, unos 25 activistas marcharon con su propia "Antorcha de los derechos humanos".
La procesión se realizó desde el Obelisco hasta la Plaza de Mayo de forma pacífica, según manifestó Liwei Fu, la principal impulsora del Falun Gong en Buenos Aires.
Sin embargo, no será el único grupo que se manifestará y habrá protestas sorpresa de activistas críticos de la represión china en el Tíbet.
Texto y foto www.lanacion.com.ar

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