Sin demostrar un gran nivel, la selección de Maradona le ganó al combinado centroamericano. La ventaja había sido fruto de un golazo de Defederico (PT 26m), enseguida puso el empate Barahona (PT 26m) y luego llegaron los goles de Bergessio (PT y ST 39m), la figura excluyente de la cancha.En un partido que apuntó a que Diego Maradona pudiera probar a jugadores del medio local, su Selección enfrentó a Panamá y la superó claramente, aunque no logró exhibir un gran nivel durante el transcurso del partido.
Argentina comenzó con un tibio manejo en el mediocampo, donde la prolijidad de Fabián Rinaudo y de Hernán Bernardello no fue suficiente para generar el juego que el equipo precisó. Por eso, hasta que Montenegro no comenzó a moverse y a acercarse a los volantes centrales, la Selección no generó peligro en el área rival.
Por su parte, Panamá fue más fuerza y ganas que fútbol, aunque estos atributos bastaron para entorpecer el juego y, por momentos, hacer pie en la mitad. La insistencia de Luis Tejada más los interesantes movimientos de Nelson Barahona fueron lo mejor de la visita. Pero no era suficiente para un partido sumido en una chatura insondable.
Hasta que Matías Defederico rompió los esquemas y apareció por derecha, enganchó tras una serie de rebotes en el área y sacó un zurdazo inatajable para Jaime Penedo, de buena actuación. Entonces, se sacudió el letargo y el partido se hizo de ida y vuelta. Enseguida, un error en defensa permitió que Barahona se encontrara con la pelota en el borde del área y con categoría marcara el empate.
Subió la temperatura en el Brigadier Estanislao López. La pierna fuerte se instaló en la mitad de cancha pero Argentina ya contaba con un Montenegro más afianzado y con Defederico con confianza. Así, el trámite comenzó a favorecer al equipo de Diego. Sobre el final de la primera etapa, Gonzalo Bergessio cabeceó un centro del petiso de Huracán y puso el 2-1. Lo pudo volver a empatar Panamá, pero la primera mitad se fue entre algunos golpes e insultos de más.
La segunda mitad fue otro partido. No por el cambio en el desarrollo, sino por las modificaciones que introdujo Maradona. Diego realizó las siete variantes y terminó de ver en cancha a todos sus convocados.
El trámite siguió siendo bastante chato, aunque el ingreso de Sebastián Blanco aportó mayor desequilibrio por izquierda, ya que Salvio no tuvo una buena noche. El volante de Lanús, sumado a Montenegro desde la posición de enganche, generaron lo mejor del equipo, para luego contar con dos tanques de área que inquietaron y mucho.
Bergessio y Fuertes (ingresó por Sand), arrastraron marcas durante toda la segunda etapa y coquetearon con el gol. Hasta que el delantero de San Lorenzo picó al vacío y con un potente zurdazo bajo aprovechó un muy buen pase del Rolfi para decretar el 3-1 y alzarse como la máxima figura de la cancha.
En defensa quedaron algunas preocupaciones. Otamendi no mostró su solidez habitual y Alexis Ferrero evidenció no estar del todo cómodo como stopper derecho, ya que se cerró en varias ocasiones, como en el gol, y dejó un hueco muy grande a sus espaldas.
De todos modos, el dominio del equipo de Diego nunca estuvo en duda. Prediger (reemplazó a Bernardello) se adueñó del mediocampo, Zuculini (x Rinaudo) aportó su habitual dinámica y así, las riendas del partido siempre quedaron en manos de los de casaca celeste y blanco.
No quedó mucho más para el análisis. Sólo algunas actuaciones individuales y un relativo orden en mitad de cancha. Sin dudas, el gran ganador de la jornada fue Gonzalo Bergessio, quien generó riesgo durante todo el partido y tuvo su recompensa con dos golazos.
Texto y foto www.tycsports.com
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