El equipo de Ramón Cabrero venció a los charrúas con goles de Sebastián Blanco (ST 7m) y José Sand (ST 18m) en el cierre del Grupo 2. Descontó Cristian Bardaro (ST 41m). Con este resultado, se metió entre los 16 mejores del torneo.
Lanús venció este martes por 2-1 a Danubio, en Montevideo, y se clasificó segundo del Grupo 2 de la Copa Libertadores para meterse de cabeza en los octavos de final de la competencia.
En el primer tiempo, ambos equipos salieron a estudiarse. Durante los diez minutos iniciales ninguno de los dos asumió riesgo alguno, algo llamativo sobre todo de parte del equipo uruguayo, que estaba obligado a golear al Granate para aspirar a clasificarse.
Ramón Cabrero paró dos líneas de cuatro bien definidas y bien juntas, esperando que los uruguayos salieran con todo en búsqueda del triunfo para aprovechar los espacios. Ante ese panorama el equipo argentino se empezó a animar y fueron entonces los charrúas quienes se pararon de contra. Así fue como Cristian Bardaro tuvo un mano a mano con Carlos Bossio que ganó Chiquito.
La visita respondió enseguida con Diego Valeri, quien estuvo cerca de abrir el marcador con un buen remate que pudo controlar el arquero del equipo uruguayo.
El gol de Estudiantes a Deportivo Cuenca enseguida llegó a los oídos de todos en Montevideo y generó tranquilidad, porque Lanús con el 0-0 parcial se estaba clasificando y Danubio podía soñar con avanzar de fase.
Pero los minutos del período inicial corrieron sin pena ni gloria, con los dos equipos prestándose la pelota y sólo había emoción cuando llegaba a los pies de Bardaro y de Lautaro Acosta, los delanteros más peligrosos de la cancha, como para que haya esperanzas de poder observar algo mejor.
Sobre el entretiempo Lanús comenzó a adelantar lo que se vendría, porque en una misma jugada tuvo tres veces la oportunidad para abrir el marcador: primero José Sand, mano a mano con el arquero, tuvo el gol pero la pelota pegó en el travesaño, el rebote lo tomó Valeri, pero su remate dio en el palo y luego volvió a aparecer el ex delantero de River pero no le acertó al arco.
A los siete minutos del complemento los argentinos afinaron la puntería. Sebastián Blanco abrió el marcador con una buena definición tras un tiro libre de Valeri y un cabezazo que obligó al rebote al arquero, y a los 18 Sand definió bajo al segundo tras una excelente asistencia de Acosta desde la derecha.
Danubio intentó una reacción, con más empuje, con más garra charrúa que fútbol, pero no tuvo claridad como para poder descontar. Lanús después de consolidar su ventaja tuvo varias chances para aumentar, pero si no goleó fue porque no se lo propuso. Sobre el final Bardaro la empujó al descuento, pero ya no había tiempo para más.
Texto www.tycsports.com
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