Brasil, con otro juego deslucido, empató 0-0 ante el aguerrido México en Fortaleza por la segunda fecha del Grupo A. Ochoa, el arquero tricolor, tapó las más claras. Ambos venían de ganar en sus presentaciones y no pudieron dar el gran paso hacia los octavos.
Brasil, el local y gran favorito a llevarse el Mundial, no pudo lavar su imagen y cosechó un 0-0 con gusto a poco ante México en la segunda fecha del Grupo A. Ambos lideran con cuatro puntos la zona donde también están Camerún y Croacia (jugarán mañana).
Con Ramires por el lesionado Hulk como único cambio en el equipo del debut, Brasil volvió a mostrar una elaboración opaca. Sólo Neymar y sus flashes de creatividad le dieron algo de juego a los locales. Por su parte, México respondió con equilibrio, agresividad en la presión y contragolpes.
En el parejo y duro primer tiempo, Brasil tuvo las dos chances más claras para marcar aunque no pudo con la figura del arquero Ochoa. Los mexicanos, con la velocidad de Layún por izquierda (a espaldas de Dani Alves) y la movilidad de Peralta en el área, plantaron batalla y exhibieron los desacoples defensivos del dueño de casa en el retroceso, como ya lo había hecho Croacia.
La cara brasileña fue aun más deslucida en el amanecer del complemento. Scolari buscó reacción con Bernard por Ramires, aunque poco cambió. México se animó a robar la iniciativa y lanzó una serie de avances que pusieron al anfitrión contra las cuerdas. Chicharito Hernández se sumó al circuito ofensivo en el mejor momento tricolor.
Neymar, una vez más, fue el único capaz de inventar para Brasil. A su vez, Jo entró por el estático Fred para respaldar al crack del Barcelona. Y luego de varios minutos complicados, Brasil respondió para avisarles a los mexicanos que estaba débil pero vivo. Pero entonces sobrevino la figura estelar de Ochoa para evitar que la alegría fuera brasileña.
Con Ramires por el lesionado Hulk como único cambio en el equipo del debut, Brasil volvió a mostrar una elaboración opaca. Sólo Neymar y sus flashes de creatividad le dieron algo de juego a los locales. Por su parte, México respondió con equilibrio, agresividad en la presión y contragolpes.
En el parejo y duro primer tiempo, Brasil tuvo las dos chances más claras para marcar aunque no pudo con la figura del arquero Ochoa. Los mexicanos, con la velocidad de Layún por izquierda (a espaldas de Dani Alves) y la movilidad de Peralta en el área, plantaron batalla y exhibieron los desacoples defensivos del dueño de casa en el retroceso, como ya lo había hecho Croacia.
La cara brasileña fue aun más deslucida en el amanecer del complemento. Scolari buscó reacción con Bernard por Ramires, aunque poco cambió. México se animó a robar la iniciativa y lanzó una serie de avances que pusieron al anfitrión contra las cuerdas. Chicharito Hernández se sumó al circuito ofensivo en el mejor momento tricolor.
Neymar, una vez más, fue el único capaz de inventar para Brasil. A su vez, Jo entró por el estático Fred para respaldar al crack del Barcelona. Y luego de varios minutos complicados, Brasil respondió para avisarles a los mexicanos que estaba débil pero vivo. Pero entonces sobrevino la figura estelar de Ochoa para evitar que la alegría fuera brasileña.
Texto www.tycsports.com
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