La Academia ganaba con un tiro libre de Patricio Toranzo (PT 28m) y alcanzaba a Estudiantes en lo alto del certamen, pero Mario Regueiro (ST 14m), César Carranza (ST 23m), Carlos Izquierdoz (ST 38m) y Guido Pizarro (ST 47m) decretaron un 4-1 para la recuperación Granate que sonó excesivo, pero dejó a La Academia hundido en su desilusión.
Racing pasó este sábado en un puñado de minutos del regreso a su ilusión de pelear por el Torneo Clausura a verse goleado y lejos de sus sueños de gloria. Empezó ganando, pero le faltaron ideas y contundencia para rubricar la victoria y terminó padeciendo un 4-1 frente a Lanús que no fue de la mano con la realidad del trámite pero dolió y mucho en el espíritu académico.
El conjunto de Miguel Russo sacó provecho de su eficacia en un primer tiempo entretenido y parejo. Porque el local, a través de las subidas de Luciano Balbi, pinceladas de Mauro Camoranesi y Diego Valeri y la asociación de Mario Regueiro y Gonzalo Castillejos hizo bien su trabajo, y se fue al vestuario en desventaja porque La Academia también tuvo un período bueno, con un voluntarioso Pablo Lugüercio que se destacó entre los tres atacantes bajando y ofreciéndose como salida. Sin embargo, quedó claro que la ventaja parcial no fue del todo justa.
Castillejos avisó primero en dos oportunidades, en una disparó alto y en la otra le sacaron la pelota en la línea. Como respuesta, lo mismo le pasó a Gabriel Hauche, que casi anota con un exquisito taco que despejaron sobre la cal. Hasta que, a los 28 minutos, Patricio Toranzo ejecutó un tiro libre de peligro por sobre la barrera y la pelota ingresó a media altura a la izquierda de un Mauricio Caranta cuya tardía y extraña reacción colaboró con la conquista.
Pero en el complemento, el por entonces líder padeció una ecuación que suele repetirse en el fútbol: hizo el gasto, pero los goles se los hicieron a él. Primero apareció un Teófilo Gutiérrez sin su mejor versión, pero se topó con Caranta. Y así, a los 14, Camoranesi habilitó hacia la izquierda, Mario Regueiro avanzó y definió con un ángulo muy cerrado al primer palo, cuando parecía que Jorge De Olivera esperaba el centro.
La igualdad hizo que la visita se adelantara varios metros, intentando gestar sus avances desde Claudio Yacob y Toranzo, pero arriba le seguía faltando explosión. Gabriel Hauche se esforzaba, pero todos caían sistemáticamente en las redes del fondo granate. Por el contrario, cuando los de Gabriel Schurrer, se lo proponían, lastimaban a fondo. Así fue que a los 23 lanzó un balón Valeri, el ingresado Leandro Díaz se la bajó de cabeza por izquierda a otro relevo, César Carranza, y éste anticipó a De Olivera para el segundo.
Cada gol parecía motivar más a La Academia para salir a buscar su gol, pero su escasez de orden e ideas se convertían en su propia trampa. Hauche desperdició su intento con un disparo afuera, y Díaz obligó al esfuerzo a De Olivera con un cabezazo. Hasta que a los 38 Carranza ejecutó un tiro libre frontal y Carlos Izquierdoz marcó el tercero de cabeza. Los de Avellaneda no lo podían creer, pero se les había escapado el partido.
Entonces, así como Racing buscaba otro tanto para al menos dejar una mejor imagen y Yacob estrellaba un tiro en el travesaño, la respuesta le tenía reservado otro cachetazo. Y en el último minuto, el 47, el tercer cambio de Schurrer también dio sus frutos. Guido Pizarro entró por derecha y definió al segundo palo para el cuarto. Definitivamente, era la noche para la recuperación de Lanús y no la de un Racing con que el presente se ensaña para obligarlo a replantearse.
Texto y foto http://www.tycsports.com/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario