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viernes, 18 de septiembre de 2009

Torneo Clausura 2009 - Huracán 1 Estudiantes (LP) 4

Se impuso en Parque Patricios con goles de Juan Manuel Salgueiro (PT 38m), Mauro Boselli (PT 44m), Enzo Pérez (ST 33m) y Maximiliano Núñez (ST 43m) y supera por un punto a Rosario Central, que juega después. El Globo descontó por intermedio de Patricio Toranzo (ST 10m).
Estudiantes hizo gala de su contundencia y logró un triunfo por 4-1 sobre Huracán en Parque Patricios, consiguiendo un resultado que lo coloca, al menos transitoriamente, en lo más alto del Torneo Apertura. Lo decisivo del trámite fue la gran practicidad del Pincha para aprovechar sus virtudes de equipo, haciendo estériles los buenos momentos del local y sacando rédito de sus problemas defensivos.
El primer segmento del encuentro las imprecisiones se adueñaron del campo de juego. El Pincha arrancó esbozando algo más (Juan Manuel Salgueiro lo tuvo tras un rebote pero definió afuera), pero de a poco el Globo mejoró en el mediocampo de la mano de Mario Bolatti. Rodrigo Díaz llegó a estar cara a cara con Damián Albil, pero ganó el uno.
Entonces llegó el primer golpe de la visita. A los 38 minutos, Salgueiro recibió frente a Gastón Monzón y anotó picándosela por arriba. Y a los 44, en un gran contraataque, Marcelo Carrusca avanzó por izquierda, mandó un centro que le sacaron del buche a Enzo Pérez y Mauro Boselli definió a la red.
La segunda mitad empezó con una buena para el Pincha, un mano a mano de Boselli que tapó Monzón, pero a los diez Patricio Toranzo sacudió la modorra con un terrible remate desde 40 metros que, con colaboración de Albil, se convirtió en el descuento.
Entonces, por un momento, los de Angel Cappa soñaron con empatar. El empuje de Toranzo, que tuvo otra chance que le ahogó Albil, un tiro desviado del Rengo Díaz y una falta de Clemente Rodríguez que pareció penal pero no advirtió Juan Pablo Pompei demostraron que el local estaba vivo.
Pero otra ráfaga de Estudiantes, volcado a la contra, arrastró a la decepción al Globo, con su defensa en línea y serios problemas en la marca. Enzo Pérez apareció por izquierda, amagó y anotó el tercero a los 33, y a los 43 el ingresado Maximiliano Núñez recibió también por izquierda y decretó la goleada.
El partido estaba liquidado y la alegría era toda platense, gracias a que su decisión y eficacia fueron más fuertes que las buenas intenciones que supo esbozar el alicaído Huracán. Y por ahora, el premio para los de Alejandro Sabella es nada menos que el liderazgo.
Texto y foto www.tycsports.com

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