Las Leonas son otra vez de bronce. Al igual que en Atenas 2004, el seleccionado argentino femenino de hockey sobre césped se subió al tercer lugar del podio, y de esta manera se transformó en el primer equipo colectivo en lograr tres medallas en un Juego Olímpico, ya que también habían ganado la plata en Sydney 2000. Fue 3-1 ante Alemania, en un encuentro muy emotivo.
El seleccionado conducido por Gabriel Minadeo dejó atrás la dolorosa goleada sufrida ante Holanda en semis y salió a buscar el triunfo con mucha garra, apelando a una presión asfixiante en mitad de cancha en el arranque. De esta manera, metió al conjunto germano en sus 25 metros y generó tres cortos en los primeros 10 minutos.
En el último córner, Claudia Burkart recibió de Mariana González Oliva, luego de una mala recepción, y decretó el merecido 1-0, que le dio tranquilidad al equipo nacional. Y 13 más tarde, Alejandra Gulla quedó mano a mano con la arquera europea, quien amortiguó el remate, y Carla Rebecchi la introdujo en el arco con un toque suave.
Argentina bajó la intensidad luego de 25 minutos muy buenos y las alemanas se adelantaron unos metros, aunque no lograron generar peligro. Contaron con un corto, pero González Oliva llegó a cruzar ante del disparo. De esta manera, el combinado albiceleste se fue al descanso con una ventaja interesante.
El complemento se dio de otra manera. Alemania salió a buscar el descuento desde el arranque y metió al conjunto albiceleste, exhausto luego de tanto esfuerzo, en su campo. A los nueve, luego de un par de chances, las germanas se anotaron en el marcador: Kühn, con un remate potente desde la puerta del área, venció a Paola Vukojicic.
Las Leonas sintieron el golpe y se retrasaron aún más. Las europeas siguieron presionando y atacando por todos los sectores. Contaron con tres cortos, pero no lograron concretar gracias a la excelente tarea de la arquera argentina, que además se lució en un par de mano a mano. Argentina tuvo una muy clara de contra a los 18, pero Rebecchi no logró definir con la bocha picando y el sufrimiento se estiró.
Y cuando parecía que Alemania llegaba a la igualdad, Noel Barrionuevo, quien no había podido marcar en todo el torneo, puso el 3-1 mediante un corto a los 28. Luego fue aguantar y tirarla lejos. Magdalena Aicega y González Oliva fueron los pilares para mantener la ventaja. Luciana Aymar no entró mucho en juego y Argentina la extrañó.
Fueron a buscar el oro, en el cierre de un ciclo fabuloso. No lo lograron, pero se trajeron un bronce que vale muchísimo. Otra vez hicieron historia para nuestro deporte. Un grupo que luchó siempre y entregó todo. No es poco.
Texto y foto www.tycsports.com
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