Arsenal se hizo fuerte en Sarandí y, cuando su cruce ante Rosario Central parecía inevitablemente encaminado al empate sin goles, acertó y se llevó todo el premio al imponerse por 1-0. Y pese a que las mejores chances estuvieron del lado canalla, al equipo de Ariel Cuffaro Russo le faltó voluntad para liquidar el pleito en el aburrido tramo final y terminó pagándolo muy caro.
Los minutos iniciales fueron para el local, que con buenas actuaciones de Javier Yacuzzi y Franco Jara comenzó a instalarse en la zona de creación, aunque sin ideas. Sólo el primero complicó en el inicio con un tiro libre que sacó Jorge Broun.
Después vino el momento de los rosarinos, en los que se destacaron Lucas Moya y Jonatan Gómez. Primero fue una contra que terminó con un mano a mano de Emiio Zelaya con Cristian Campestrini y que ganó el uno y después un cabezazo de Diego Braghieri tras un córner que reventó el travesaño. Después, Arsenal respondió con un gol increíble que se perdió Cristian Alvarez con Broun vencido.
El inicio del complemento fue un bodrio. Pero de a poco el Canalla se animó a hacer un último intento de llevarse los puntos. Gómez seguía complicando y el ingresado Gonzalo Choy González buscó la sorpresa con un tiro por sobre Campestrini, pero se fue por arriba. Después, Franco Peppino cometió un agarrón sobre Braghieri en el área, pero Carlos Maglio no vio nada. Y Arsenal, que se había reducido a esperar alguna contra, respondió con un cabezazo de Jara que pasó muy cerca.
Y cuando se escurría el encuentro, a los 41, llegó la emoción. Un Central que ya parecía conforme perdió la pelota en una salida, Jara no se pudo acomodar, descargó hacia la derecha sobre otro ingresado, Mauro Matos, y éste mandó el centro al primer palo para que el mismo Jara cabecee alto, esquinado y a la red.
No hubo tiempo para más. El irregular Arsenal volvía a sonreír de local y Central se quedaba sin nada cuando había arrancado soñando con la punta.
Texto y foto www.tycsports.com
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