El conjunto de Floresta se impuso por 3-1, con goles de Eduardo Domínguez, Jonathan Ferrar y Mauro Matos, y se acomodó a tres puntos de Boca. Gastón Fernández, de penal, anotó el tanto del Pincha, que terminó con diez por la expulsión de Sergio Modón.
La regularidad de All Boys a lo largo del Clausura le permite mantener vivas las esperanzas de pelear por el título. Con el triunfo logrado ante Estudiantes, en Floresta, el equipo de José Romero se acomodó a tres puntos de Boca, el líder del campeonato, cuando todavía faltan dos fechas para el final. Es difícil, pero no imposible.
Juan Sebastián Verón, disminuido físicamente pero con la calidad intacta, interviniendo a un toque, fue el jugador más pensante de los platenses, que presentaron una formación con varios juveniles. En el Albo, el despliegue físico fue mayor y el ida y vuelta de Juan Pablo Rodríguez por la banda izquierda resultó fundamental para marcar la diferencia.
El equipo de Martín Zuccarelli avisó a los 16 minutos con una maniobra elaborada entre Verón y Gastón Fernández que el delantero definió con clase, por arriba de Nicolás Cambiasso, pero desviado. Luego respondió All Boys: un tiro de Martín Zapata afuera, otro de Rodríguez, contenido por Agustín Silva, y finalmente un cabezazo de Mauro Matos que Eduardo Domínguez llegó a empujar para poner el 1-0. Antes del descanso, Estudiantes tuvo una más en los pies de Duván Zapata que tapó muy bien Cambiasso.
El Albo volvió a sacar provecho de la pelota parada en el inicio del complemento, con un córner ejecutado por Matías Pérez García y un cabezazo de Jonathan Ferrari. La expulsión de Sergio Modón, a los 13 minutos, pareció terminar con las esperanzas de Estudiantes, pero el Pincha resurgió gracias a un gol de penal de la Gata, quién picó su remate con sutileza.
Las ilusiones de los platenses volvieron a derrumbarse rápidamente, cuando Mauro Matos, de cabeza y tras un rebote que dio el arquero Silva ante un remate de Rodríguez, la metió de cabeza. La fiesta se desató en las tribunas de Floresta, frente a un equipo que mostró actitud y capitalizó sus oportunidades para mantener vivo su sueño.
Texto y foto www.tycsports.com
Juan Sebastián Verón, disminuido físicamente pero con la calidad intacta, interviniendo a un toque, fue el jugador más pensante de los platenses, que presentaron una formación con varios juveniles. En el Albo, el despliegue físico fue mayor y el ida y vuelta de Juan Pablo Rodríguez por la banda izquierda resultó fundamental para marcar la diferencia.
El equipo de Martín Zuccarelli avisó a los 16 minutos con una maniobra elaborada entre Verón y Gastón Fernández que el delantero definió con clase, por arriba de Nicolás Cambiasso, pero desviado. Luego respondió All Boys: un tiro de Martín Zapata afuera, otro de Rodríguez, contenido por Agustín Silva, y finalmente un cabezazo de Mauro Matos que Eduardo Domínguez llegó a empujar para poner el 1-0. Antes del descanso, Estudiantes tuvo una más en los pies de Duván Zapata que tapó muy bien Cambiasso.
El Albo volvió a sacar provecho de la pelota parada en el inicio del complemento, con un córner ejecutado por Matías Pérez García y un cabezazo de Jonathan Ferrari. La expulsión de Sergio Modón, a los 13 minutos, pareció terminar con las esperanzas de Estudiantes, pero el Pincha resurgió gracias a un gol de penal de la Gata, quién picó su remate con sutileza.
Las ilusiones de los platenses volvieron a derrumbarse rápidamente, cuando Mauro Matos, de cabeza y tras un rebote que dio el arquero Silva ante un remate de Rodríguez, la metió de cabeza. La fiesta se desató en las tribunas de Floresta, frente a un equipo que mostró actitud y capitalizó sus oportunidades para mantener vivo su sueño.
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