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jueves, 6 de noviembre de 2008

Botafogo (Bra) 2 (2) Estudiantes (LP) (Arg) 2 (4)

El Pincha empató 2-2 y se clasificó a las semis con un global de 4-2. Angeleri y Salgueiro aventajaron a los de Astrada, mientras que Lucio Flavio y André Luis, quien luego se fue expulsado, empardaron el juego.

Estudiantes sacó a relucir su mística copera y se metió en las semifinales de la Sudamericana tras igualar con Botafogo en Río de Janeiro, bajo una intensa lluvia, por 2-2. Los de Astrada cerraron el cruce con un global de 4-2, ya que en La Plata se habían impuesto por 2-0, y ahora se chocarán con Argentinos, que pasó a Palmeiras.
El Pincha comenzó a definir la serie cuando apenas iban 3 minutos de juego. Marcos Angeleri, quien se proyectó por la banda derecha durante todo el encuentro, entró en el área y sacó un remate cruzado que se metió en el fondo del arco gracias a una ayudita de Renan, el arquero de los brasileños
A partir de entonces, el Botafogo aprovechó que Estudiantes retrocedió varios metros en el campo y comenzó a dominar el juego, aunque casi siempre chocó contra una sólida defensa visitante (buena actuación de Christian Cellay). La más clara: un remate de Lucio Flavio, desde la medialuna, que se fue besando el poste izquierdo de Mariano Andújar.
Pero en el entretiempo Nery Franco movió las piezas y las cosas cambiaron, especialmente con el ingreso de Lucas, quien le dio aire al equipo. A los 13 minutos, Juan Manuel Díaz derribó a Renato Silva en el área, el árbitro cobró penal y Lucio Flavio facturó desde los doce pasos. Entonces una luz de esperanza apareció en el local, que siguió buscando y alcanzó el empate rápidamente, tras un rebote que encontró André Luis en el corazón del área. Pero Botafogo fue demasiado ingenuo para ir en busca de la hazaña y comenzó e pegar y a ensuciar el partido. Así, el mismo André Luis se fue expulsado por doble amarilla. El defensor, además, le sacó la tarjeta de la mano a Carlos Chandía y provocó un escándalo.
Estudiantes, inteligente, siguió con su juego, hizo correr la pelota y no se metió en problemas consciente de que deberá comenzar definir las semifinales la semana próxima, ante Argentinos, en La Paternal. El Pincha demostró que tiene la mística intacta y ahora va por el gran objetivo del semestre: la conquista de la Copa Sudamericana.
Texto y foto www.tycsports.com

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