El Granate estuvo dos veces abajo en el marcador, pero se repuso y le ganó a Arsenal por 5-2, con tres goles en los últimos 10 minutos. Sebastián Blanco fue la figura del partido.Lanús se impuso por 5-2 en su visita a Arsenal, tras un cierre a puro gol, y quedó a un paso de jugar la próxima Copa Libertadores, ya que sacó nueve puntos de luz con tres partidos por jugar. Los dirigidos por Burruchaga salieron decididos a imponer condiciones y no tardaron en obtener buenos resultados. A los cinco, Cristian Alvarez, recientemente convocado a la Selección por Maradona, trepó por la banda derecha y sacó un preciso centro para la solitaria entrada de Diego Galván, quien con un toque bajo marcó el primer gol de la tarde.
La conquista no cambió en nada el desarrolló del juego. Lanús siguió sin juego y arrinconado contra Marchesín, mientras que el local monopolizaba la pelota y disponía de las mejores situaciones. Antes de los 10, un tremendo bombazo de Medina se estrelló contra el palo derecho. A punto estuvo Arsenal se empezar a sentenciar el juego.
Recién promediando la primera parte, mejoró el Granate y fue por la capacidad para la recuperación y el juego de Aguirre y Pelletieri. Justamente fue el mediocampista por la derecha el que habilitó a Sebastián Blanco para propiciar el empate a los 33.
En el complemento fueron otra vez los del Viaducto los que empezaron mejor. Claro, Lanús facilitaba la tarea con una postura demasiado timorata, a la espera de un contragolpe. Tras varias aproximaciones infructuosas, fue Javier Yacuzzi el encargado de volver a romper la paridad con un hermoso tiro libre.
Sin embargo la alegría al local le duró poco. Lanús tardó menos de tres minutos en volver a empatar: se durmió la última línea, Salcedo picó habilitado y tocó por sobre el arquero, cuando la pelota estaba cerca de ingresar al arco, aseguró la conquista el pibe Cristian Menéndez.
Sobre el cierre, cuando el juego de encaminaba a un empate clavado, más allá de una buena sacada de Marchesín ante un cabezazo de Tula, Lanús cantó bingo con un final a toda orquesta en el que hizo goles para todos los gustos. Fueron 10 minutos de ensueño: a los 38 Biglieri tocó a la red tras un pase de Blanco, a los 41 Salcedo liquidó el juego de penal tras una falta sobre Blanco y a los 46 puso la frutilla del postre Agustín Pelletieri con un buen cabezazo.
El 5-2 final, inesperado por la paridad que reinó durante 80 minutos, fue un premio exagerado para el ganador, pero a Lanús qué le importa.
Texto y foto www.tycsports.com
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