Venció a Colón por 1-0 y le puso fin a la peor racha de su historia, de 12 partidos sin alegrías. Juan Manuel Martínez, de cabeza, anotó el gol en el inicio del complemento. El partido se disputó en una Bombonera vacía por los incidentes del Superclásico.
Después de 12 largas fechas sin alegrías en el Torneo Final, Boca consiguió un triunfo. Fue por 1-0 frente a Colón en una Bombonera inusualmente vacía por la sanción motivada por los incidentes de la hinchada xeneize ante River.
El conjunto de Carlos Bianchi, que presentó un equipo alternativo atento a su participación en la Copa Libertadores, mostró un funcionamiento convincente. En el primer tiempo, controló la pelota y amenazó obligando a trabajar a Diego Pozo desde afuera del área frente a un remate de Santiago Silva y otro de Guillermo Fernández, mientras que Juan Manuel Martínez buscó también de media distancia y su tiro dio en el palo.
Sin embargo, el conjunto de Carlos Bianchi no pudo evitar que Agustín Orión debiera intervenir anticipando a Gabriel Graciani y Bruno Urribarri. Pero a los tres minutos del segundo segmento llegó la máxima emoción, cuando Lautaro Acosta escapó por derecha en una gran jugada y envió un centro para que el Burrito Martínez cabeceara a la derecha del arquero, quien apenas desvió la pelota de su destino de red.
El Sabalero de Pablo Morant -terminó expulsado al igual que el Virrey, sólo que éste fue por entrar tarde al complemento- amagó con reaccionar, pero su ímpetu duró poco. Graciani metió un cabezazo furibundo que Claudio Pérez despejó en la línea, pero luego el local fundamentó su ventaja con chances de Santiago Silva y Juan Sánchez Miño ahogadas por Pozo, un cabezazo alto de Lisandro Magallán y un tiro libre desviado del mismo Sánchez Miño. En el medio, la visita se quedó con diez por la expulsión de Bruno Urribarri.
Recién en el cierre se despertó el santafesino, pero sólo logró apretar con un cabezazo de Rubén Ramírez que atajó Orión. Así, Boca sostuvo con solidez un triunfo que le sirve para cerrar su semana más tranquila en lo que va del año; claro, impulsada por la clasificación frente a Corinthians.
El conjunto de Carlos Bianchi, que presentó un equipo alternativo atento a su participación en la Copa Libertadores, mostró un funcionamiento convincente. En el primer tiempo, controló la pelota y amenazó obligando a trabajar a Diego Pozo desde afuera del área frente a un remate de Santiago Silva y otro de Guillermo Fernández, mientras que Juan Manuel Martínez buscó también de media distancia y su tiro dio en el palo.
Sin embargo, el conjunto de Carlos Bianchi no pudo evitar que Agustín Orión debiera intervenir anticipando a Gabriel Graciani y Bruno Urribarri. Pero a los tres minutos del segundo segmento llegó la máxima emoción, cuando Lautaro Acosta escapó por derecha en una gran jugada y envió un centro para que el Burrito Martínez cabeceara a la derecha del arquero, quien apenas desvió la pelota de su destino de red.
El Sabalero de Pablo Morant -terminó expulsado al igual que el Virrey, sólo que éste fue por entrar tarde al complemento- amagó con reaccionar, pero su ímpetu duró poco. Graciani metió un cabezazo furibundo que Claudio Pérez despejó en la línea, pero luego el local fundamentó su ventaja con chances de Santiago Silva y Juan Sánchez Miño ahogadas por Pozo, un cabezazo alto de Lisandro Magallán y un tiro libre desviado del mismo Sánchez Miño. En el medio, la visita se quedó con diez por la expulsión de Bruno Urribarri.
Recién en el cierre se despertó el santafesino, pero sólo logró apretar con un cabezazo de Rubén Ramírez que atajó Orión. Así, Boca sostuvo con solidez un triunfo que le sirve para cerrar su semana más tranquila en lo que va del año; claro, impulsada por la clasificación frente a Corinthians.
Texto www.tycsports.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario