Cotización Dolár

sábado, 11 de septiembre de 2010

Apertura 2010 - Huracán 2 Banfield 2

El Taladro, que estuvo dos veces en desventaja, jugó mejor que el Globo en el partido que terminó 2-2. Los goles del local los hizo el Roly Zárate, el primero de penal, mientras que para la visita marcaron Carrusca y Zelaya. Hubo silbidos para el equipo de Rivoira.

Huracán y Banfield empataron 2-2 en Parque Patricios y sumaron un punto cada uno, aunque el conjunto del sur del Gran Buenos Aires mereció algo más que su adversario, ya que mostró capacidad de reacción y exhibió un fútbol más ofensivo. Los silbidos que bajaron de algunos sectores del Ducó al término del encuentro fueron el castigo para el combinado de Rivoira.
El partido arrancó con ritmo lento, pero no tardó en encenderse porque a los ocho minutos Víctor López lo agarró de la camiseta a Diego Rodríguez dentro del área y el árbitro Furchi cobró penal. Luego de los reclamos de los jugadores del Taladro, el Roly Zárate lo cambió por gol con un remate fuerte y alto que ingresó por el medio del arco. El tanto del Globo quebró la tranquilidad y obligó a la visita a adelantarse unos metros.
El equipo de Falcioni, de la mano de Erviti, se adueñó de la pelota y fue en busca del empate. Y lo consiguió rápidamente gracias a un grosero error de Monzón. A los 16 minutos, Gabriel Méndez probó desde media distancia y le salió un flojo disparo, sin embargo, el arquero de Huracán dio un rebote corto y al medio que Carrusca aprovechó para marcar la igualdad.
Una vez que logró el empate, Banfield fue por más. Sin un dominio claro ni arrollador, se mostró más ambicioso y generó situaciones, aunque ninguna muy clara. Buscó, sin suerte, por las bandas y con remates desde lejos. Huracán, por su parte, sintió el golpe y le llevó unos minutos reaccionar y volver al encuentro. El descanso le vino como anillo al dedo.
En el inicio del complemento, el Globo golpeó de nuevo gracias a una genialidad del Roly Zárate. A los 10 minutos, el delantero recibió la pelota en la puerta del área, aguantó la marca, giró y sacó un zurdazo que fue directamente al fondo de la red. Nada que hacer para Bologna, quien se tiró con la ilusión de tapar el balón.
De todas maneras, a Huracán la alegría le volvió a durar muy poco porque a los 16 minutos Zelaya anticipó en el área a Quiroga y metió un cabezazo digno de un goleador. Entonces, Banfield se dio cuenta de la fragilidad de su rival y redobló la apuesta. La última media hora fue toda de la visita, salvo una jugada que finalizó en gol de Mariano Martínez y que el árbitro la anuló por supuesta posición adelantada. El Taladro empujó, generó peligro y estrello un cabezazo en el travesaño, pero no pudo ganar.
Texto y foto www.tycsports.com

No hay comentarios.: