La Lepra necesitaba ganar para quedarse con el título, pero fue superada por el Ciclón, cayó como local por 2-0 y se quedó en las puertas de la historia. Fabián Bordagaray hizo los dos golesNewell´s tenía una única misión para quedarse con el Apertura: debía ganar como local ante su gente y esperar una mano de Boca ante Banfield. Se dio lo segundo, porque cayó el Taladro, pero la Lepra no cumplió con su parte y se quedó sin nada, en las puertas de la historia. Fue 2-0 ante San Lorenzo, un equipo que lo superó en toda la cancha y que le ganó con total justicia.
De arranque fue el Ciclón el que salió mejor armado. Simeone acertó con el ingreso de Civelli por el Papu Gómez porque de esa forma pudo sumar a Aureliano y a Pintos en la mitad de la cancha, una zona clave.
A los 8 minutos, Fabián Bordagaray, la figura de la cancha, madrugó a Insaurralde, fue derribado en el área y Baldassi sancionó el penal. Acto seguido, Peratta se vistió de héroe al tapar el remate del Kily González, pero para el local lo peor estaba por llegar.
En la jugada siguiente, a los11, Migliore sacó de su arco, Bordagaray corrió otra vez contra Insaurralde y en cuanto se acomodó sacó un derechazo combado que se metió contra el ángulo, en el segundo palo. Golazo del ex Defensa y Justicia y un balde de agua fría para los casi 40 mil hinchas que colmaron el Coloso.
El equipo de Sensini tardó un rato largo en acomodarse, pero promediando el complemento empezó a inquietar por la movilidad de Formica y el caracter de Bernardi. Sin embago sus primeras llegadas serias fueron cerca del cierre de la primera parte, pero Migliore se lució ante Achucarro y el propio Formica.
El comienzo del segundo tiempo fue un calco de los últimos minutos. Newell´s tenía la pelota, llenaba el área de centros, pero no tenía punch. Tras un aluvión de pelotas sobre los terrenos de Migliore y compañía, los azulgranas empezaron a salir lentamente del fondo con la capacidad de recuperación del Kily y Rivero.
A los 22, Pintos hizo honor de su apellido: dejó pintado a Quiroga por la banda derecha, llegó al fondo y buscó la entrada franca de Bordagaray. El goleador, con el arco a su merced logró el segundo tanto y se fue a bailar contra el corner.
Los 25 minutos que restaban para el cierre del partido estuvieron de más. Pese al aliento de su gente, Newell´s estaba con el alma por el piso, sin ideas y, más allá de un remate de Formica que se fue alto, no tuvo ni una sola jugada clara como para descontar. San Lorenzo ya no quería más, había hecho un desastre en el Parque y cerraba un campeonato irregular con una sonrisa.
Texto y foto www.tycsports.com
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