El Globo se colocó 2-0 en la primera etapa con goles de Toranzo y Machín, pero el Granate, en apenas 15 minutos, lo dio vuelta con dos tantos del ex delantero de Rosario Central y un penal de Maxi Velázquez, resultado de una clara mano de Gonzalo García -fue expulsado-.La imagen de Cappa como entrenador de Huracán estaba más viva que nunca. El conjunto de Parque Patricios, ya con Héctor Rivoira en el banco pero con pinceladas de aquel juego vistoso que impuso Don Angel, le ganaba 2-0 a Lanús en el sur. Sin embargo, la otra cara de ese Globo quedó al descubierto en el segundo tiempo y el Granate dio vuelta un partido que seguramente quedará en el recuerdo. Fue 3-2, con un héroe sorpresivo.
El primer tiempo se hizo de ida y vuelta desde el arranque porque ambos se olvidaron de especular, intentaron golpear rápidamente y mostraron problemas para parar el rival en la mitad de la cancha. Y la visita fue el primero en mostrar las garras: Leandro Díaz pateó y Agustín Marchesín salvó al local. Pero en la siguiente, a los 19, Patricio Toranzo probó desde muy lejos y, con mucha ayuda del arquero, decretó el 1-0 parcial.
El conjunto de Luis Zubeldía salió herido a buscar la igualdad con la habilidad de Diego Lagos y la velocidad de Sebastián Blanco, pero cuando se perfilaba para llegar a su objetivo, el equipo de Parque Patricios volvió a golpear: luego de armar una buena maniobra personal y recibir una pared de Díaz, Gonzalo García le quemó las manos a Marchesín y Gastón Machín, que llegaba por atrás de todos, concretó el segundo.
A partir de ese momento, Huracán se retrasó definitivamente y le cedió el terreno a Lanús, que apuntó sus cañones hacia Gastón Monzón y, con algo de desorden, lo empezó a pelotear. Blanco lo tuvo en un mano a mano, pero su disparo se fue a las nubes, y Matías Fritzler generó un suspiro en la popular con un tremendo remate que se perdió muy cerca del palo. En medio de ese dominio, Toranzo se escapó en otra contra y metió un zapatazo que colisionó contra el ángulo derecho.
Ese ritmo feroz se mantuvo en el complemento. El Globo siguió apostando a la contra y trató de destruir las intenciones del dueño de casa, que sin embargo siguió creando una y otra oportunidad. A los seis, tras un centro de Lagos, Salcedo se perdió un gol increíble con el arco desguarnecido, y tanto Marcos Aguirre como Gonzalo Castillejos, en su debut, probaron las seguras manos de Monzón. Finalmente, a los 29, Blanco la puso adentro, la pelota pasó entre Lagos y el arquero y el ex Rosario Central la empujó para el 1-2.
Ese tanto generó un clima imponente en la Fortaleza, que se puso de pie para darle una nueva ola de esperanza a un equipo que nunca bajó los brazos. Lagos lo perdió a los 32 en un mano a mano con Monzón, pero a los 39 llegó lo que ningún hincha de Huracán se hubiese imaginado: García bajó con la mano un centro, Lunati lo expulsó y cobró penal. Maximiliano Velázquez decretó el 2-2 y terminó de quebrar en ánimo del Globo, que estaba para el cachetazo. La estocada final llegaría sobre el final, a los 45: Grana llegó hasta el fondo y tiró el centro, Cristian Menéndez la dejó pasar y Castillejos cerró su noche soñada con otro grito decisivo.
Texto y foto www.tycsports.com
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