El Millonario no pudo recuperarse del traspié ante Newell's ni acortar grandes distancias con Lanús, y el Fortín sigue en la mitad de la tabla pensando en la Copa. El olvidable empate les quedó bien a ambos.
Prometían más, pero el duelo entre River y Vélez en el Monumental se quedó apenas en eso, en promesas. Los roces y la intensidad arrasaron así con las buenas intenciones y el 0-0 calzó cómodo para lo exhibido por los protagonistas.
El primer tiempo empezó con un gran ritmo que hizo que el público se ilusionara con un ida y vuelta imperdible. Allí, Federico Insúa tuvo la más clara de todo el encuentro cuando tocó la pelota por derecha por debajo del cuerpo de Marcelo Barovero, pero su ex compañero llegó a quedarse con el tiro.
Después, las aguas se aplacaron y, si bien fue el Fortín el que manejó el balón, no encontró la fórmula para desnivelar en los últimos metros y recién cerca del descanso Jonathan Copete intentó desde afuera pero su remate se fue alto.
El anfitrión, esperando recuperar y sorprender en velocidad, también pecó de instrascendente, y sólo logró amenazar con una aparición de Rodrigo Mora y un disparo de lejos de Leonardo Ponzio, en ambos casos topándose com Sebastián Sosa.
El complemento lo empezó y lo terminó mejor el elenco de Ramón Díaz, de la mano de un creciente Ponzio, pero los de Ricardo Gareca también se movieron con la batuta del Pocho y fue a través suyo que fabricaron la más clara del segmento, cuando Barovero le ahogó el grito.
Después, Sosa intervino ante Carlos Sánchez y, pese a esos minutos finales en los que pareció estar más cerca de desnivelar el local, no hubo llegadas claras para ningún bando.
Así sobrevino un final olvidable, tanto para un Fortín que ve alejarse el primer pelotón de la tabla como para un Millonario que no logró recuperarse ni en fútbol ni en resultados del traspié con Newell's y dejó pasar una buena chance de presionar arriba a Lanús.
El primer tiempo empezó con un gran ritmo que hizo que el público se ilusionara con un ida y vuelta imperdible. Allí, Federico Insúa tuvo la más clara de todo el encuentro cuando tocó la pelota por derecha por debajo del cuerpo de Marcelo Barovero, pero su ex compañero llegó a quedarse con el tiro.
Después, las aguas se aplacaron y, si bien fue el Fortín el que manejó el balón, no encontró la fórmula para desnivelar en los últimos metros y recién cerca del descanso Jonathan Copete intentó desde afuera pero su remate se fue alto.
El anfitrión, esperando recuperar y sorprender en velocidad, también pecó de instrascendente, y sólo logró amenazar con una aparición de Rodrigo Mora y un disparo de lejos de Leonardo Ponzio, en ambos casos topándose com Sebastián Sosa.
El complemento lo empezó y lo terminó mejor el elenco de Ramón Díaz, de la mano de un creciente Ponzio, pero los de Ricardo Gareca también se movieron con la batuta del Pocho y fue a través suyo que fabricaron la más clara del segmento, cuando Barovero le ahogó el grito.
Después, Sosa intervino ante Carlos Sánchez y, pese a esos minutos finales en los que pareció estar más cerca de desnivelar el local, no hubo llegadas claras para ningún bando.
Así sobrevino un final olvidable, tanto para un Fortín que ve alejarse el primer pelotón de la tabla como para un Millonario que no logró recuperarse ni en fútbol ni en resultados del traspié con Newell's y dejó pasar una buena chance de presionar arriba a Lanús.
Texto y foto www.tycsports.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario